"El amor es una dolencia, y como toda dolencia puede paliarse de varias maneras: con una cura, o con la muerte."


To my future me

Here I am,

writing to you,

while I decide if I should commit suicide,

or I should try it one more time

I hope for you, everything is going well


I hope there is no more hurt there,

no pain,

no scars,

no yelling,

no slamming doors,

no weeping,

no foes,

no fights.

I hope you are not feeling lonely anymore

I hope you are smiling wherever you are

I hope you are not wearing that mask,

the one you used to hide what you were feeling inside


I hope you do not feel that fire inside you,

that you don't set in fire your tongue

burning everyone around you


I hope you can control your words now

I hope you feel calm and peaceful

I hope you have forgotten everything you've done

and everything you haven't

I hope you have forgiven yourself

I hope you don't feel guilty all the time for all the pain you caused


I hope you are not struggling to stay alive

I really hope you have stopped hurting

the only people that used to love you


I hope you feel happy now

in your little black coffin


Marea

cómo no hablarte puede ser la mejor medicina

cuando la enfermedad es herirte

herirte a ratos

herirte siempre

herirte como de casualidad

aunque ambos sabemos que no existe

que la causa y el autor es la misma

que las palabras que se me escapan de entre los labios

son como balas

y cada disparo me deja sin fuerza y a ti,

con la herida abierta.

y claro que se puede parar el sangrado

pero no hay una solución mágica que elimine las cicatrices

que a veces duelen más que los golpes

que son el tatuaje preferido de cualquiera que llegue a conocerme

que sabe que no tengo filtro

ni muro de contención

ni diques que paren este mar de reproches

este tsunami de palabras envenenadas

y no se puede controlar a la marea

aunque quisiera

porque no se puede arreglar con palabras

lo que he roto con las mismas

mías

como si eso fuera todo lo que soy

marea incontrolable

pero no

también soy caricia

y consuelo

y me arrepiento

y fallo es cierto

pero me vuelvo a arrepentir

que a veces el retroceso del disparo duele más que la bala que recibes

te lo aseguro

y yo me quedo con la pistola en la mano

y tú, sangrando,

sin querer saber de mí

quizá tengas razón

y soy sólo eso

asesina

que no merece redención.


Aislada

Asomada a la ventana, mirando al cielo cómo mira un poeta el comienzo de la primavera. ¿Cómo se puede estar encerrada con las ventanas abiertas? Observa cómo el árbol perdió una de sus hojas. Cómo la suave brisa la sostiene en el aire hasta que finalmente la deja caer. Pero los ajetreados viandantes no tienen tiempo, ni ganas, de pararse a mirar. Así que todos ellos la terminan pisando, hasta que apenas queda rastro de ella. ¿Quién tiene la culpa? ¿La hoja por caer? ¿O el viento por arrastrarla? ¿Debió quedarse callada? ¿O hacerse notar? ¿Fingir que estaba muerta? ¿Desaparecer? ¿Qué haces cuando no quieres que te pisen pero no puedes evitar caer? ¿Qué haces cuando pretendes ser viandante, pero siempre terminas siendo hoja? ¿Qué haces cuando ya no sabes qué llevas dentro porque hace demasiado tiempo que nadie trata de buscarlo? ¿Qué haces cuando mueres de histeria pero tu casa se ha instaurado en una absoluta calma desde que nadie llama a la puerta? ¿Cómo vuelves a casa si no hay ningún lugar al que llamar hogar? ¿Qué haces cuando no eres hogar para nadie? La eterna pregunta: ¿Si un día desaparezco...? ¿Si un día caigo del árbol alguien se daría cuenta de que no estoy? La respuesta siempre ha estado ahí, pero tenías demasiado miedo para darte cuenta.

13 de marzo de 2020, Madrid



Der Wanderer über dem Nebelmeer

Me llaman tempestad

por la facilidad para romperlo todo

y la velocidad

Ojalá haber sido

la persona de la que nunca quieres huir

porque ella es hogar,

refugio,

destino.

Que lo cura todo,

que con un gesto

alivia el dolor

No necesitas explicaciones

ni respuestas sólo

que te coja de la mano

y te lleve a otro lugar

da igual dónde pero con ella

se para el tiempo

y nada importa

y nada duele

Lo sé muy bien porque

eso eres tú para mí

paz, calma, antidepresivo,

un chute de esperanza cuando más hace falta

un poco de cordura cuando pierdo la cabeza

una f(l)echa clavada 

una contradicción en mayúsculas

que me hace olvidarlo todo

con una mirada de esas,

de las tuyas

Quizás no hace falta

dar explicaciones

cuando lo sabes lo sabes

¿Te dolería decepcionarme?

¿Te dolería no ser

lo que andaba buscando?

¿Te dolería no estar ahí para mí?

Como una puñalada en el pecho

así es como duele

28/02/20


Ego

What I feel inside

Es el frío del invierno,

que mata todo lo que florece al llegar.

Que arrastra las hojas hasta su lecho de muerte: el suelo.

Que se lleva la vida y la esperanza y la alegría.

Es el rapto de Perséfone, que se lleva cada año la primavera.

Es el viento que azota las ramas, y la rama que entra por la ventana.

Cristales rotos y un charco de sangre.

Es el cierre de la discoteca,

cuando apagan las luces y todos se van a casa.

Es un accidente de coche, por culpa de nadie, víctimas mortales.

Es todas las putadas que te pasan

cuando llegas tarde y pierdes el autobús

quedarte sin batería en mitad del viaje

golpearte el pie con la esquina de la mesa

cuando te armas de valor, por fin le pides una cita

y te dice que no.

Es todos esos días en los que te levantas sin ganas de nada

en los que desearías no haber despertado

y todas las noches en las que sientes que no puedes más.

Es el llanto que nace en el peor momento:

cuando no estás solo.

Es la parte que duele en cualquier canción.

Es la foto con tu ex colgada junto a tu cama.

Es un alma fría

que no siente

no le importa

no le duele.

No te quiere

ni te odia.

Simplemente se ríe

al saber que puede herirte

causarte tanto dolor

que no vuelvas a sonreír nunca

y se ríe.

14/11/19


La culpa siempre duele

Y (casi) nunca se va

Me he puesto una meta inalcanzable

recomponer lo que está hecho pedazos.

Yo sola, porque nadie puede ayudarme.

Una vez leí: "la peor batalla es contra uno mismo"

y nunca lo he sentido tan cierto.

No sé si estoy rota.

Y no sé si es normal sentir que quieres desaparecer.

No sé si soy quién hago daño,

o el dolor quién viene conmigo,

me sigue como una sombra.

Ya no sé cuándo se apartan de mí,

y cuándo yo aparto a las personas.

Siento que no tengo el control

de nada en mi vida y lo que más siento

es la culpa..

Siempre está presente

En todo lo que he hecho mal

y en todo lo bueno que podría haber hecho

y no hice.

Y no sé cuándo seré capaz de perdonarme a mí misma.

Pero creo que cuando lo haga

dejaré de destrozar a quienes tengo cerca.

Tengo que luchar

yo sola 

contra mí misma y mi propia cabeza

por ti, 

pero sobre todo por mí.

Mi "small room",

supongo que nunca salí de esa habitación.

Y tengo que hacerlo sola

eso es lo que más me asusta.

Por eso repito "quédate" una y otra vez

mientras reabro tus heridas.

Porque me asusta más estar sola

que seguir haciéndote daño

y está mal

porque la culpa llega después

después de cometer el error

siempre tarde

cuando ya te has ido

cuando vuelvo a estar sola.

He sido tan egoísta

que duele.

Dicen que sufre más el que engaña

que quien es engañado.

Porque la culpa duele siempre

y (casi) nunca se va.

Porque perdonarme a mí misma

siempre fue mi tarea pendiente.

Y no voy a pedirte que me perdones

si yo no puedo hacerlo.

Y no voy a pedirte que lo entiendas

si yo no puedo entenderlo.

Y no voy a repetir "quédate"

para que compartas conmigo un vacío

que es sólo mío.

28/10/19



La bala perdida

Silencio.

Eterno silencio.

No me repitan otra vez 

mis incesantes errores.

Ya escuché suficiente.

Ya me hundí del todo.

Ya entendí por qué nadie quiere quedarse.

Ya entendí por qué alejarse es tan fácil

cuando se trata de mí.

No soy de las que suelen rendirse

más bien de las que lo destrozan todo a su paso

hasta reducirlo a cenizas.

Si pudiera me quedaría

siempre aquí

donde no puedo respirar

no tengo fuerzas para moverme

menos para intentarlo de nuevo

sabiendo que fracasaré.

Llámalo huir

llámame cobarde 

yo lo llamo supervivencia.

No puedo escuchar una vez más

el daño que hice.

Y no sé qué importa ya

si las balas me han atravesado

si tus palabras ya están en mi cabeza

y nunca voy a olvidar lo que soy

que no he cambiado

que nunca he sabido

y que siempre voy a romper todo

todo lo que toco.

Con la estúpida perfeccionada virtud de estropearlo todo,

consigo transformar cada momento feliz en un infierno,

el infierno que debe ser mantenerse a mi lado a pesar de todo,

el frío que debe sentirse cuando con un suspiro derribo nuestro castillo de naipes

y me doy cuenta siempre tarde

de que me he vuelto a equivocar.

Llámalo huida

yo lo llamo querer

hasta el punto de no llamar cuando lo único que quiero es saber de ti

sabiendo que yo soy la única que puede herirte

y cuanto más trato de evitarlo más termino haciéndolo.

Al borde de la vía.

La perfeccionada virtud de estropearlo todo.

Sentada al borde la vía,

comienza a llorar desesperadamente.

Aparecen los viajeros que no han llegado a coger el último tren,

y sus sollozos se escuchan cada vez más alto.

Ahí es cuando se da cuenta de que no es invisble, si no de que a nadie le importa.

Y aún siente vergüenza y le gustaría estar en su cama o en el final de aquella vía.

En cualquier lugar donde pudiera sentir que desaparecía.

Porque si realmente a nadie le importaba, no quería estar allí ni en ningún lugar.

¿Y por qué iba a importales?

¿Que había hecho ella para ser un impacto en la vida de alguien?

En el buen sentido, claro.

Si ella arrasaba con todo por donde quiera que pasaba.

Tanto que después del incendio las cenizas huían,

con el miedo irremediable de ser su próxima víctima.

¿Por qué iba a importarle a nadie?

Si sus actividades favoritas rimaban con cristal roto, 

y era aficionada a las salidas de emergencia cuando todo se derrumbaba.

No sabía estar ahí, nunca supo.

Por eso recibió la otra cara de la moneda cuando pidió auxilio:

Silencio.

Hacía mucho que dejó de llorar,

por lo cual se había extendido la idea de que era una pequeña hija de puta sin sentimientos.

Pero claro que los tenía.

Dejó de llorar porque aprendió que las lágrimas no consiguen que vuelvas atrás en el tiempo, 

que es lo único que ella quería cuando tenía ganas de llorar.

Y aprendió también que no tiene sentido llorar, 

ni tener lástima de sí misma, 

cuando se sabía responsable de todas las putadas que le habían pasado.

Era perfectamente consciente de sus errores, aunque le costara horrores admitirlos ante otros.

Piensa mucho en la muerte, 

sobre todo baraja la idea de que sería más sencillo acabar con su vida que intentar encauzarla.

Cambiar tampoco fue nunca su fuerte, 

uno de sus incontables defectos.

Y cambiar tampoco era una opción, 

porque sabía que intentarlo de nuevo sólo tenía un desenlace, y no era nunca el que le gustaría.

Todo debido a que tenía la perfeccionada virtud de estropearlo todo.


06/09/2019

Título

Ella colgó en su pared un

 cuadro donde le estaba abrazando

Él perdió la foto que le regaló

Ella gastó sus ahorros en comprarle lo que más quería

Él olvidó su cumpleaños

Él decidió dejarlo cuando las 

cosas se pusieron complicadas

Ella se quedó destrozada

Él volvió después de un tiempo

Y ella decidió darle una segunda oportunidad

Todo parecía haber cambiado

Pero él volvió a olvidar lo que tenía

Y ella volvió a hacerse falsas ilusiones

Ella puso los sentimientos de él lo primero

Y se olvidó de lo que ella necesitaba

Ella pasó el día esperando para verle

Él decidió dejarlo para otro día una vez más

Ella le dijo que estaba mal

que se sentía sola que todo iba mal y le necesitaba

Él estaba cansado

y triste

y no quería más problemas

así que decidió no contestar

pero ella pasó toda la noche esperando su llamada

él no llamó

Ella se quedó temblando

viendo cada vez más que él no iba a llamar

que a él le daba igual

Así se durmió en un mar de lágrimas 

y a la mañana siguiente se arrepintió de haberle dado una segunda oportunidad

Él llamó a la mañana siguiente

pero por supuesto ya era tarde

tarde para preocuparse o para pedir perdón

tarde para arrepentirse

y tarde para estar ahí 

Ella se alejó para siempre

y él, por supuesto, nunca entendió por qué 


Ojalá

Baby you look happier

-Habla a otros

que no te dañen como yo,- dijo.

-Yo le hablaré a ella

para no dañarte.-

Y yo no quiero que te vayas

quiero que te quedes

y que se vaya esta sensación.

Pero parece que viene contigo.

Así que yo hablaré a otros,

y tú te irás con ella,

con la única

y absurda diferencia

de que para mí solo son otros

que no son tú

y para ti es ella,

y ojalá, ojalá

haber sido ella.

14/05/2019

Imagina dos


Tenías razón

al decir que no era el momento.

Yo tenía razón

cuando dije que nunca lo sería.

Tenían razón

cuando dijeron que íbamos a acabar mal

Mi madre tenía razón

cuando me dijo que esto era lo mejor.

Y lo que más me jode es que yo tenía razón

cuando pensé que no tenía sentido

que si ya era difícil reparar un corazón roto,

imagina dos.

29/04/2019


Blind

No vi nada

llevaba los ojos vendados.

No hice nada

tenía las manos atadas

lo juro.

No podía,

de verdad que no podía.

Sólo oía,

lo escuché todo:

Los gritos, los aullidos

y no pude más que sentir la noche

y la luna llena.

Sentí el corazón crujiendo

resistiendo

haciéndose el fuerte

partiéndose en dos.

Lástima

me sentí víctima

de todo

pero no hice nada.

Quería ser fuerte

y luchar y contar después

que hice todo lo que pude.

Escribí,

y derramé la sangre en el papel

pero no en la batalla.

Intenté hablar con la mirada

pero ya no tenía nada que decir. 

Ya es sólo un recuerdo

pero duele decir

que no hice

nada.

31/03/2019.


28 de marzo

Quiero pensar que es un número más,

que fuimos dos vidas más 

que estaban unidas para luego no estarlo.

Quiero pensar que querrás a otra y yo seré feliz,

quiero aceptar que se ha acabado 

y me dolía pensar que no tuvo una despedida.

Sólo son 3 años,

olvídalos.

Sólo es nuestra vida juntos,

olvídala. 

Sólo es t o d o lo que daba fuerzas,

qué importa ya.

Así que aquí estoy, diciendo adiós a lo que me hizo libre y dolió tanto.

Aquí estoy recordando todos los momentos que enterré en aquel cajón

como cuando cogimos un tren y acabamos en la playa

como cuando te dije "no te vayas" y no te quedaste

como cuando pasaste toda la noche hablando de

cómo

cuánto

y por qué me querías

pero sobre todo sobre todo

cuando pensé que sí...

y no.

Cuando pensé que no tendrías despedida

cuando pensé que podríamos siempre con todo.

Quiero pensar que nos faltó tiempo

que fue un malentendido

que pensaste en mí

que fue el destino.

Quiero pensar que todo fue por un motivo

cuando eso ya da igual.

Por qué busco explicación si lo único que importa ahora es que 

no estás.

Y no sé si duele más que pensarlo, saberlo,

pero hoy lo digo en voz alta

ya no estás y ya no somos

y todo lo que fuimos antes no es más que pasado

y lo que seremos ahora

no me he arriesgado

a pensarlo todavía. 

Porque lo que he aprendido esta vez es que

confiar en que todo saldrá como quieres

o como debería ser

o como ojalá fuera

sólo causa dolor.

Sino ahora seríamos uno

y somos dos.

26 de marzo de 2019, Madrid


Ella

Hola.

Sé que no estás ahí.

Pero vengo para despedirme.

Vengo para decir hasta aquí.

Ya basta

del dolor y del miedo

de las falsas esperanzas

de las mentiras

de tus putas mentiras.

Ya basta de ti y de mí

porque todo lo que fuimos 

sólo es una mentira más.

Ya basta de llamarte cuando no debo

de no tener fuerzas para colgar

cuando oigo risas al otro lado del teléfono

y yo estaba a punto de llorar por ti.

Ya basta de estar por alguien que nunca estuvo para mí.

De imaginarme que eres como nunca fuiste

nunca cambiaste.

Todo era igual, como yo quería.

Éramos los mismos y yo estaba enamorada

porque tú mentías

y yo te creía

yo me volvía loca

y tú me mentías.

Éramos los de siempre,

y yo ya no quiero ser esa nunca más

porque tú nunca dejarás de serlo.

22 de marzo de 2019, Madrid.


No reason

He visto los faros del coche

y he parado.

Mis piernas lo han hecho,

pero mi mente no.

Mi mente ha seguido

y ha escuchado las sirenas.

Ha sentido paz

calma

por no tener que volver

a estar sola

a equivocarse

a estar perdida

al miedo

y a levantarse sin motivos.

No saber qué hacer ni qué estoy haciendo.

Saber que no estás y yo nunca estaré

Volver a lo de siempre

A llorar a solas

y fingir que todo va bien

que todo va.

Estoy hecha 

pedazos

un desastre

un lío.

No me creo nada

no me importa nada

no soy

nada.

20/03/2019


-

Volver a volver

Estoy en mi casa

En la cama

En pijama

Esperando a que aparezcas

A que vuelvas a llamar

Cuando sé que no pasará

Que esta vez no es como las otras veces

En las que sabía que siempre ibas a volver

Esta vez es distinto

Y duele acostumbrarme a ti

A un tú que ya no está

Para perderlo todo

A ti y a mí

Que nunca seremos los mismos

Fumo y finjo que olvido

Espero un milagro

Volver atrás

Siempre volver

Volver a volver

Lo siento

Pero no puedo volver

A las ruinas

De lo nuestro

Clavarme las astillas

De los recuerdos

Volver a ser la que ya no soy

Volver a sentir lo que ya no debo

Volver a decir te quiero

Y ver en tu cara que tú ya no

Que ya no más

Que no como yo

Que no como antes

Me ahogaré en los recuerdos

Que es lo único que queda

de verdad

16/03/19.

Fase 3: Duelo

V: Aceptación

Salida

Veo la puerta de salida

Pero cada vez que intento cruzarla

un mensaje dice: 

"¿Seguro que quieres abandonar?"

Y me siento tonta porque ni quiero,

ni estoy abandonando.

Me han echado a patadas de aquí,

de mi lugar favorito.

Y ahora sólo me queda esta puerta

y un nudo en la garganta.

Sé lo que significa cruzar, 

y por eso aún no lo he hecho.

No porque tenga más alternativas.

Sólo retraso lo inevitable.

Así que me quedo en lugar seguro,

en casa,

cerca de lo malo conocido:

un dolor que me recuerda a ti y me hace sentir tranquila.

Si cruzo esa puerta

no habrá llamadas

(ni si quiera borracha,

cuando esa voz que me dice "no le llames" desaparece).

No habrá nosotros,

ni rastro.

No podré permitirme el lujo de hablar de ti,

ni si quiera de pensarte.

Ya no podré verte como el amor de mi vida

sino como un amor

que pudo ser, pero no fue.

Tendré que olvidarme de lo que dijiste

sobre quererme de verdad,

sobre esperarme siempre.

Tendré que admitir que todo se acaba

incluso nosotros.

Y lo que tuvimos se convertirá en una isla a la que nunca podré volver

de la que sólo quedarán recuerdos.

Hasta que, incluso estos,

se difuminen, se vuelvan borrosos

hasta desaparecer.

Hasta no ser nada.

Y nosotros, dos desconocidos.



Pero me doy cuenta de que no importa

porque sigo sin estar allí,

sigues sin estar aquí,

sigue sin haber nosotros.

La isla no existe,

acabó en ruinas como Roma.

Ya no queda nada, sólo recuerdos.

Ya no hay llamadas

(ni si quiera borracha),

ni puedo permitirme el lujo de hablar de ti.

Me doy cuenta de que lo único que queda

para que esto se termine

es cruzar la maldita puerta.

Así que me levanto

camino hacia ella

"¿Seguro que quieres abandonar?"

-"No. No hay nada que abandonar. 

Aquí no queda nada, sólo yo."

Y por fin la atravieso.

Y esto es un adiós.

15/03/2019.


IV: Depresión

Fuimos poesía

Fuimos poesía

Iniciamos la primavera con nuestro primer beso

Provocamos tormenta cuando todo terminó

Nos sentimos irrompibles

Valientes

Fuimos uno siendo dos

Bailamos toda la noche

Sin parar de reír

Sin tener nunca sueño

Te miraba al dormir

Y tú me preparabas café

La vida seguía y no importaba

Porque la pasaba contigo

Se me partió el corazón

La última vez que te vi

Y ya no te miré al dormir

Y ya no te llamé cuando me sentía sola

Y ya no esperabas en el portal de mi casa

Ni te preocupabas por mí

Ni me preguntabas

"¿Qué tal?

¿Todo bien por la universidad?

¿Cuándo te veré?

Me haces volar."

Pero ahora eso no importa porque fuimos poesía

Lo fuimos todo y lo incendiamos

Ahora jugamos con las cenizas.

10/03/2019.


III: Ira

Te veo en todas partes. 

Veo tus ojos en todas las miradas. 

Oigo tu risa en mi cabeza.

Oigo nuestra canción en cada canción.

Salgo a la calle y cada persona que veo eres tú, que viene, se acerca y me dice que se equivocó.

Que no debió perderme y que intentarlo vale la pena.

Que han pasado los días y no puedes vivir sin mí.

Respiro pero no tengo aire.

Respiro pero no vivo.

Intento pensar que todo era mentira, pero no es verdad.

Todo era real, y eso es lo que duele.

Que lo que era real sólo es un espejismo, un sueño, una sombra.

Cierro los ojos y ya no vivo. 

Lo que duele no es querer.

Lo que duele es querer estar con alguien que no quiere estar contigo.

Deja de mandar señales.

Deja de confundirme.

Cada palabra es esperanza para mí.

Te quiero pero te odio.

Déjame odiarte.

Déjame alejarme.

Déjame despedirme.

Vete, por favor.


II: Negociación


No sé cómo decir adiós a alguien que siento la mitad de mí,

tal vez por eso duele como si me estuviera matando.

El amor prende tu corazón en llamas. Pero después te mata.

El amor es la mejor sensación del mundo, pero cuando se va...

No se lo deseo a nadie.

El amor te hace sentir vivo, te deja su abrigo cuando tienes frío y te abraza cuando estás mal.

El amor hace que te guste lo que antes odiabas.

El amor echa de menos tan fuerte...

El amor te mira a lo ojos y te hace feliz.

El amor, con un beso, cura todas tus heridas.

El amor hace tonterías sólo para verte.

El amor te hace esforzarte, intentar ser mejor.

El amor te hace adicto, como una droga.

El amor siempre está ahí.

El amor promete no terminar nunca.



Pero el amor se equivoca,

rompe promesas y hace daño.

El amor te falla.

Da miedo.

Desconfía.

Te hace volverte loco.

Te hace perdonar lo que nunca perdonarías,

y decir lo que nunca dirías.

Te mantiene despierto toda la noche,

te pone nervioso, te cansa.

Te rompe poco a poco.

Y después de jurar que nunca se iría,

se va.

Y te deja solo,

en el peor sentido de la palabra.

Solo de vacío, solo de no sentir nada.

Y cuando miras hacia delante, 

no ves nada.

Sólo recuerdos, sombras de lo que fuisteis,

y un tímido eco, que suena igual que su voz.


El amor no es justo. Se va cuando más lo necesitas y aparece cuando menos lo esperas.

El amor duele, siempre, un poco.

Pero parece que merece la pena, porque no hacemos más que buscarlo.

Sabemos lo que duele y seguimos intentándolo.

Pero ante todo, aunque se vaya, el amor es eterno.

5 de marzo de 2019, Madrid


I: Negación

Lo que fuera

Daría lo que fuera, porque no fuera así. Porque fuera mejor, porque fuera más.

Por haber sido más, haber dado más,

y así hacer que te enamores de mí como de ninguna otra,

que pensaras en mí tanto,

que no tuvieras tiempo de pensar en nadie más,

no de esa manera

(como yo te pienso).

Que no fuera tarde para pedir perdón,

que no fuera tarde para perdonar

que no fuera tarde para hacerlo mejor.

Que cuando te mire a los ojos

vea lo mismo que veía antes.

Ojalá fuera más fácil,

me quieres o no, 

lo demuestras o no,

me coges o me sueltas,

estás o no estás. 

Pero a veces sentir que no estás

es lo que lo cambia todo,

es lo que lo rompe todo.

27/02/2019.

Sola

Quiero estar sola y no sentirme sola

Dejar de estar tan cansada para poder seguir

intentándolo

Lleno la bañera para poder ahogarme en ella

¿Y de qué vale todo?

Si está presión no desaparece haga lo que haga y no encuentro solución

Si soy yo misma la que se está asesinando

mientras suplica a gritos que no quiere morir

Por favor quiero parar

Dejar de moverme

No dejo de correr a todas partes y cuando llego nunca quiero estar allí

Dejar de sentirme así

Escucho música y me duele la cabeza

Intento cantar y me falla la voz

Intento parar pero no puedo y sigo

Y hacerme daño es lo único que se me da bien

Y alejar a cualquiera que intente ayudar

para después sentirme sola

22/02/2018.


Espero que mañana, invites a otra. Y que cuando suba las escaleras de tu casa, te acuerdes de mis pasos. Que cuando abras la puerta vaya a tu habitación y te de un beso, y pienses que no entra cantando como hacía yo. Que cuando la mires a los ojos pienses que no tienen mi color, que cuando folles con ella pienses en mi cuerpo y mientras te corres pienses en mi voz en tu oído. Que cuando se ría pienses en mi risa.

Y que cuando salga por la puerta te sientas como una mierda. Pero no porque se va, sino que te sientas como una mierda porque sigues pensando en mí.

Fase 2: Vaivén


Goodbye

Quizá yo no esté hecha para estar aquí

Para hacerlo bien.

Para arreglar las cosas.

Quizá solo valga para intentarlo

una

y otra

y otra vez

intentarlo más

intentarlo mejor

y estropearlo aún más.

Para buscar culpables

cuando la culpable era yo.

Para buscar razones

cuando la única razón era yo.

Para buscar encuentros y 

generar rechazo

y odio 

y rabia y

para abrir la boca

y soltar el veneno.

Para herir y no saber

no poder curar.

Quizá no estoy hecha para vivir aquí.

Sino para hacerlo mal

una y otra vez

hasta darme cuenta de que debería

estarme quieta

cerrar la boca

callar

e irme.

09/11/2018.


Carta de despedida

No pido perdón,

porque lo he dicho tantas veces,

que la palabra ha perdido su significado.

He conocido dos veces el amor,

la primera a cámara lenta,

la segunda demasiado rápido

(sobrepasando los límites de velocidad).

He tenido poca suerte,

y esa poca la he gastado.

Nadie ha sabido quererme

como mi mente enferma necesita

y yo más que querer, he dañado.

Porque mi forma de querer es hiriendo

es mordiendo a quien intenta acariciarme

es olvidando lo que realmente es importante.

No creo en nada

más 

que en el destino

y el mío está escrito al revés, 

en tinta azul que se corre,

destrozando más el cuento.

Y lo que más me ha dolido ha sido

conocerme 

entenderme

y saber quién soy.

Y por eso digo adiós,

hasta nunca,

y no pido perdón,

porque seguramente ya es tarde.

24/08/2018.


Monster

Tengo escamas sobre mi piel

mi piel de serpiente.

Y escupo veneno en lugar de palabras.

Cuando intento abrazar desgarro

con mis uñas afiladas

y cuando intento besarte muerdo.

No es mirada dulce, es mirada asesina

de la que es más fácil huir que enamorarse;

Y mi corazón no puede ser dañado

porque no puede dañarse aquello que está hecho trizas.


Es irónico porque

parezco a salvo en mi habitación

y mi corazón al borde de un precipicio,

en medio de la tormenta

enjaulado

sin ganas ya de salir

porque perseguir aquello que desea

sería como perseguir el horizonte

(estúpido)

"Si amas algo déjalo libre,

si vuelve es tuyo,

si no nunca lo fue".

Dejé la puerta abierta y se marchó.

(Mensaje captado)

Lo que me hacía fuerte

y valiente y feliz,

lo que me daba calor,

me tiene helada.

Y cuando la única solución

sería volver atrás en el tiempo

sólo dan ganas de que el tiempo se acabe.

16/07/2018.


Recaída


Estoy gritando

tan alto como me permiten los pulmones.

Me estoy ahogando y pienso

que quizá no necesito respirar

porque me estoy asfixiando y sigo viva.

Soy el puto ojo del huracán

y todo lo que toco sale despedido.

Normal que nadie quiera acercarse.

Y cuando gritar ya no funciona

me alejo despacio y sin hacer ruido.

Huir siempre fue mi mayor virtud.

Música triste y suave

sólo soporto cerca lo deprimente

porque me entiende y me hace compañía.

Quizá por eso te alejo

porque llevas demasiada primavera por dentro

y yo siempre he sido invierno.

Pero ya lo sabías,

por eso me amaste y por eso te vas.

Porque engancha y duele como la heroína

te va matando y yo

no quiero que seas víctima

no quiero ser tu asesina.


26/05/2018.



Renacer

'Looking for the great escape'

De esta salgo,

aunque sea sola,

con el agua al cuello,

a punta de pistola.

De esta salgo.

Creía que salía de esta habitación,

y me encuentro ahora más al fondo.

Nuevos cortes reemplazan a las viejas heridas.

Pensé que estaba mejor.

Y he hecho más daño 

del que pensé que podría.

¡Marchaos, por favor, dejadme sola!

la locura no está hecha para ser compartida.

Aunque me caiga y me hunda,

sigo.

Sigo aquí pero sobre todo sigo escribiendo.

Una escapatoria temporal,

de mí.

¿Cómo vas a entenderme?

si nunca me entendí yo.

Lo único que he entendido hasta ahora,

es que todo

lo que toco

se rompe.

No es una amenaza,

es mi carta de presentación.

16/03/2018.


Título

Diles que se puede estar unidos estando lejos

Vivía pendiendo de un hilo,

me descuelgo y sé lo que me espera:

el suelo.

No me esperes

espérame

no desesperes.

¿Qué tiene ella que no tenga yo?

Quizá no es lo que tengo si no lo que soy

quizá es que no doy

lo que te esperas

lo que te daba ella,

por eso me voy.

Porque ya no hay manera

de sentir que me deseas

que corro por tus venas.

Qué ironía

tú aún vives en las mías.

Diste un volantazo a 200

he salido despedida

estoy perdida

y ya no sé cómo volver (contigo).

Puedes marcharte y no dejarme sola

puedes abrazarme sin tocarme.

O darlo todo por perdido

dejar a medio hacer el camino.


Yo mientras me muero por dentro

tú decides si por ti, o contigo.

04/04/2018.


Fin

Crónica de una muerte anunciada.

No me siento fuerte

sino ingrávida 

irrompible

incorpórea 

y todo lo que empiece con un negativo.

Ya no sé lo que soy

ni lo que merezco

me desvanezco.

Y tú,

no quiero ni nombrarte,

has machacado la rosa y no te ha rozado ni una de las espinas.

Me has convertido en nada

cuando éramos todo.

Has convertido en nada tus palabras,

y has conseguido, hijo de puta,

que para mí la confianza se añada a esa lista de palabras que ni entiendo ni quiero entender.

Ya no busco más escusas,

porque de qué serviría. 

He buscado tantas para mantener a flote un barco que ya estaba hundido.

Porque te dejé al timón, mientras tú estabas en otros puertos, entre otras piernas.

Me dejas rota y te vas.

Y no duele, porque ya no siento nada.

Ya no sé ni quién eres.

Ni me importa ya.

25/03/2018.


XVII

Deja de preguntarme qué me ha pasado,

que lo mío viene de serie.

Antes bailaba frente a los espejos

ahora prefiero el silencio

y me da miedo mirarme.

Antes te hacía sonreír y ahora ni yo puedo

y te largas,

y lo he pillado.

No abandono el barco hasta que se hunda

aunque lleve años encharcado.

Deja de remar porque no vale la pena

porque me he tirado desde la cubierta

y ni si quiera sé nadar.

No debiste ignorar mi señal de toxicidad,

estas son las consecuencias:

para ti silencio

para mí, vacío.




Era casi de noche. Abrió Spotify y buscó Calling Me de Alva Leigh. Me gustaría decir que su novio, amigos, familia, no dejaban de enviarle mensajes, de llamarla, de buscarla por las calles a pesar del aguacero. Me gustaría decir que al menos alguien la buscaba, ya que llevaba dos días sin dar señales de vida. Pero no. No siempre las cosas son como deberían ser. Hacía frío y el cigarrillo aún encendido reposaba sobre el cenicero. Abrió la ventana y olía a lluvia. Y, sin apenas pensarlo, saltó.

13 de enero de 2018.


XVI

Qué triste cuando

no hace falta decirte:

"no hace falta que vengas"

porque ni si quiera pensabas venir,

ni si quiera sabes que estoy aquí.

Tanto repetir que me estoy ahogando

y siguen sin tomarme en serio;

no sé qué hacer ya para que me creas.

Cuando ya no responda a tu "¿cómo estás?"

cuando por fin me fallen las fuerzas

cuando susurre a gritos que no puedo más

cuando esté, pero ya no sea

¿entonces me tendrás en cuenta?

¿Sabrás verme entonces?

Cuando te agote la monotonía 

cuando quieras volver a sentirme

cuando al fin te acuerdes de mí...


04/10/2017.


XV

Me estoy ahogando.

No hace falta que me salves;

pero sálvame, por favor.

No te pido nada...

ni si quiera lo merezco.

Me basta la cafeína en vena

y la nicotina en mis pulmones.

No necesito nada, de verdad,

no necesito que me ayudes. 

Me pregunto por qué las noches

duran siempre más que los días,

incluso en verano.

No me necesitas cerca,

y aunque yo te necesite

nunca voy a decirlo. 

No quiero que vivas conmigo a bajo cero

si nunca te agradó el invierno.

Respiro, a duras penas, 

pero aún respiro.

Así que no necesito que me salves,

estoy bien.

15/09/2017.



XIV

Está bien sentirme sola

porque estoy sola en esto

y puede que en todo.

No sé si saltar

o arrojarme

no veo la diferencia

de ambos modos voy a sangrar

y no pienso

salpicarte

más.

Prometí no dañarte

y no dejo

de hacerlo.

Tiene gracia,

porque ni escudos me quedan.

Ya no sé defenderme

ya no siento nada

sólo que no quiero

sentirme así más.

O me convierto en roca

o me parto como el cristal.

Apostaría por la segunda,

pero ya no vuelvo a apostar

si nunca acierto.


XIII

Pedirte que te quedes

ya no es una opción.

No me quedan de esas

ni oportunidades

ni a ti ganas

y sólo una bala.

No sé si usarla contra mí

o guardarla en la recámara

para cuando necesite respirar

tú ya no estés

y ya no pueda.


XII

Adoro la dulce condena

de esperarte siempre.

De soñarte mientras

ya no te siento mío.

Llamarte en silencio tiene gracia

no llego a rozar 

ni tus pensamientos.

Quizá demasiado niña

demasiado tonta

demasiado fácil

olvidarse de mí, ¿no es eso?

Temblando 

a estas alturas

sigo en mi jaula

de cristal

por si decides pasarte.

08/06/2017.


XI

He forzado tanto la sonrisa 

que me he desencajado la mandíbula por ti.

He tragado tanta pólvora de tus cañonazos,

que me he intoxicado de palabras hirientes, 

por ti.

He frenado la tormenta en mis lagrimales.

Y si tuviera que arrancarme la piel,

y salir huyendo,

renunciar a mis principios,

dejar de leer poesía...

creedme que lo haría, 

por ti.

Pero esta noche no he derramado

ni una lágrima, amor.

Porque apostaste al 28, rojo,

y siempre vence el negro.

Porque esta noche hay luna llena,

y siento que mi alma vuela cuando,

aún con todo, puedo hacerte sonreír.

28/05/2017. 


...

Las cosas no han cambiado desde la última vez. Ni cambiarán. Porque no soy como la chica de los libros. Porque no puedo elegir el argumento, el espacio y el tiempo y escribir un guión. Porque mi vida podría resumirse en unos puntos suspensivos. En todo lo que nunca terminé de construir y las personas que nunca terminé de conocer. En las huellas que he dejado y en el daño que causé. Sobre todo en el daño. En las veces que no te llamé, ni lo intenté otra vez, y dije lo siento demasiado tarde. E intenté curar las cicatrices antes que las heridas. Y aunque no haya obtenido nada, nada es más de lo que alguna vez intenté conseguir.  No tengo miedo al olvido, porque he dejado inumerables vacíos a mi paso. Que me hacen presente. Que hacen memoria a la chica del silencio, como la obra de John Cage. Mis memorias tendrán por título "Café, frío", e irían seguidas de una infinidad de páginas en blanco.

11 de marzo de 2017, Madrid.


X

Como si al tocarte

pudieran romperte

como a un vaso de cristal.

Como si conocerte

hiciese daño.

Te alejas de todo

y de todos

siempre

01/03/2017.


IX

¿Sigo existiendo aunque nadie pueda verme?

Aunque todas las cosas que creía ciertas

se vuelvan difusas

y mis ojos dejen de mirar

y deje de sentir el corazón en el pecho,

a pesar de sentirme una sombra

sigo aquí.

16/01/2017.


VIII


Y si me equivoco de nuevo

y si estropeo la última oportunidad

¿seguirás ahí?

Y si no soy cómo pensabas

y si dejo de ser

¿aún puedes quererme?

¿Y si me rindo?

El sabor de tocar fondo me resulta familiar.

Y si después de romperte 

en mil pedazos

te echo de menos.

¿Puedo confiar aún, después de todo,

en que vas a volver?

Y por qué cada vez que pienso

en enseñarte aquello de mí

que nadie ha visto 

no se me ocurre ningún motivo

para que decidas quedarte.

15/01/2017.


Freefall

Llevo tanto tiempo en esta caída libre, que cuando finalmente choque contra el suelo... Os vais a asustar, os lo juro. Se levantará el mayor vuelo de aves jamás visto, y en las noticias el presentador anunciará alerta por posible atentado. Pero sólo soy yo, haciéndome pedazos. O no. O a lo mejor apenas es perceptible, como el aleteo de una mariposa. Tampoco nadie se dio cuenta cuando tropecé la primera vez y caí al precipicio. Tanto hace desde ese momento que ya ni tengo miedo. Ya sólo tengo ganas. Sólo tengo puta curiosidad de ver quién es capaz de escuchar el golpe. Aunque ya sea tarde. 

Tal vez nadie sabe vivir, y no soy la única. Quizá todos estemos jugando a hacernos daño, a ver quién es el valiente que resiste hasta el final. 

23 de junio de 2016, Madrid.


VII

Cuando pensaba que no podía hundirse más

descubrió que siempre

hay posibilidad de caída libre

sobre todo cuando se vive en las nubes.

Nunca aprendió a caminar

porque siempre fue más de aviones

y de barcos de papel

o de cualquiera que nunca tocase con los pies en la tierra

Volaba

siempre a ras del suelo

sin hacerse notar.

Nunca llevó reloj

ni se adaptó a fechas ni horarios

Decía

que no quería ser esclava del tiempo

09/05/2016.


Utopía

Otros pronosticaron tormenta, pero llegó él como salvavidas, para salvarme la vida y acabó siendo irónicamente el huracán que puso todo patas arriba. Él era la última página de mi libro favorito, mi Principito y yo su rosa, que no supo cuidarle bien, que fue menos de lo que merecía. El olor de la calle cuando llueve, la primera calada del último cigarro, una utopía.

7 de mayo de 2016, Madrid.

Fase 1: Soledad


VII

Escribir sobre suicidios sin tener que dar 

explicaciones, 

bailar en medio de la calle con tu sombra,

llevar la falda más corta de Madrid, 

besar bajo la lluvia una boca cualquiera. 

Que te recorran el cuerpo mil escalofríos. 

Sobrevivir una tormenta. 

Fumar, 

y olvidar todos tus problemas al soltar el humo. 

Aprender a respirar.

05/05/2016


VI

Rompieron mis alas

y me refugié en la saliva de otros

esperando encontrar la tuya.

Confíe en bocas

que sólo prometían mentiras.

Rompí corazones

y medias.

Abrasé orgullos

con la lengua llena de verdades.

Me hicieron caer y volvieron con un:

"te echo de menos".

Tú a mí me sobras, decía.

Ojalá un abrazo

(de los tuyos).

"Me voy,

no quiero hacerte daño".

Se me olvidó decirte

que solamente duele cuando te vas.

30/04/2016.


V

Fuera de lugar,

de plano.

Escuchando tus pasos acercarse

esquivando las ruinas de lo que fue la ciudad

de mi vida.

A un paso de curarse las cicatrices

abro de nuevo las heridas

como una tonta

por simple inercia

o locura.

Ayúdame a bailar

sin equivocarme de paso

como suelo hacer

en todo.

¿Soy yo el ángel de quién tanto hablas?

Porque si es así

se me olvidó cómo volar.

24/04/2016.


Su magia

Hay días en los que me gustaría cambiar las cosas. Y veces en las que pienso si no las he cambiado ya, y qué me lo impide. Hay que empezar con uno mismo, se dice. Pero para eso tendría que poner mi vida por completo del revés. Por eso aún no he tenido tiempo de cambiar las cosas. Pero dazme tiempo. 

Algún día veréis una sonrisa preciosa cruzando las calles de Madrid, y será por mí. Estoy procurando convencer a esa sonrisa de que salga cada día. Para que así, poco a poco y por inercia, dejándose llevar, comience a salir sola al reflejarse en el espejo, incluso cuando yo no esté. Y cuando lo consiga, habré logrado mucho. Yo sé lo que se siente al cruzarse de golpe y de frente con alguien así. Eso que llaman magia sin truco, que se esconde bajo el telón de sus pestañas, que provoca más adrenalina que una caída libre sin paracaídas.

Y siento una verdadera lástima por lo que nunca llegaréis a conocer.

Su voz en un susurro, su manera de explicarse como si todo fuera sencillo, su mirada de: "tranquila, sólo acabamos de empezar". Sus lunares, cómo bebe las cervezas, cómo arruga la nariz cuando sonríe. 

Siempre vestía de negro como si ya llevase dentro los colores. 

18 de abril de 2016, Madrid.


IV

Dicen que los excesos son malos.

Pero no me importaría excederme de ti,

o contigo.

10/04/2016.


III

Siempre tenía heridas en las rodillas

y nunca recordaba por qué.

Quizás porque la vida

envidiosa

le hacía caer

por su forma de caminar

sus maneras

el vuelo de su falda

su magia

por su poesía sin versos

por sus pestañas.

Porque sin pretenderlo

provocó que artistas

se dejasen de paisajes y bodegones

para retratarla,

que los músicos creasen 

acordes y claves de Sol 

en el final de su espalda

y que los poetas no escribiesen más

a la Luna

para escribir algo como esto.

14/03/2016.


Small room

Es como si vivieras dentro de una habitación llena de cuchillos afilados, que no dejan de cortarte cada vez que te mueves. Con que respires es suficiente. Cada vez que ves a alguien llamar a la puerta, sonríes. Te hace sentir mejor saber que quizás no estás tan sola como pensabas. Piensas que quizá esta vez esta persona venga para quedarse. Y cuando te dispones a abrir la puerta, te das cuenta. Nadie quiere entrar en una habitación como esta. Entonces te quedas en silencio, con la mano ya en el pomo de la puerta, esperando a que se marche aquel que fue tan valiente de atreverse a llamar. Pero hay unos pocos que se quedan. A pesar de que no abriste la puerta, y que rechazaste amablemente su oferta de formar parte de tu vida, lo siguen intentando. Aún no sé si por curiosidad o porque se mueren de ganas de estar en tu vida. Lo intentan una y otra vez hasta que tú, no sabes ya si por cansancio o por aburrimiento, abres. Ya sabes lo que pasará a continuación. Se asustará y buscara alguna escusa improvisada para poder largarse cuanto antes. Algunos aguantan un día, otros unas semanas, hubo quién llegó a aguantar un año. Pero siempre ocurre lo mismo. Una vez alguien me dijo: "¿y por qué no te mudas? ¿Por qué no sales de esa habitación y buscas una con mejores vistas y llena de flores?

Pero, ¿y si esa habitación está en tu cabeza?

13 de marzo de 2016, Madrid.


II

Él no era lobo,

ni yo su Luna.

13/03/2016.


I

He vuelto.

Me prometí no volver a escribir.

Me aseguré de que no le hacía bien a nadie antes de cerrar el cuaderno,

y me acostumbré a los folios en blanco.

Pero el vicio le gana a la moral,

las tijeras al papel,

el corazón a la cabeza,

la maña a la fuerza

y la realidad a la utopía.

Son cosas que ya sabemos.

Aprendí a ser fuerte,

y solía bailar en el centro del huracán cuando el peso del mundo me empujaba hacia el suelo.

Pero supongo que esto es como montar en bici, y también lo he olvidado.

Me enseñaron a ser abierta, y decidí callar.

Me enseñaron a ser amable, y también callé.

Me dijeron sonríe y no lo hice.

Porque también me dijeron sé tú misma.

09/03/2016.


Monótono

Me hacen gracia los cambios. Bueno, déjame explicarme bien. Me hacen gracia esos momentos en los que pensamos que habrá grandes cambios en nuestra vida. Nueva casa, nuevo trabajo, nueva pareja. Siempre intentamos cambiar las cosas, cuando empezamos a perder algo de lo que paradójicamente la vida carece: sentido. Buscamos volver a sentir, porque duele menos sentir dolor que no sentir nada. Cambios buenos o malos, sólo queremos sentir algo. Y buscamos desesperadamente algo que no podemos alcanzar. Porque los cambios vienen solos. Con pequeños gestos, con las cosas que menos te esperas. Con un mensaje, al escuchar una canción, al escoger un camino nuevo para volver del trabajo. Puede que tu vida no cambie, pero algo cambia dentro de ti. Algo que te hace seguir. Que te da fuerzas o un dolor insoportable, pero no importa, porque has conseguido lo que todos buscan, sentir algo. Espero que ese cambio llegue pronto, porque realmente es insoportable mirar atrás y ver que sigo siendo la misma persona de hace años en una escena diferente. Y me estoy rompiendo la cabeza por encontrar ese cambio que llegará solo, en una noche de tormenta o en un abrazo de esos que no tienen por qué. No importa cómo ni de qué manera, pero que llegue rápido, por favor. La sensación de impotencia al ver que caminas y caminas y sigues siempre en el mismo punto. La sensación de que pasarán los años y todo seguirá exactamente igual que hasta ahora, cambiando paisajes y actores de reparto, pero sin cambiar ni un milímetro el argumento. Estoy cansada de esta película, que alguien queme el carrete, y que me salve de esta monotonía de hielo, por favor.

17 de mayo de 2015, Madrid.

 Stable within gravity

© 2016 Madrid.
Creado con Webnode
¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar